1 de enero de 2011

Dichoso 711

Vista del patio árabe del Casino de Murcia, 2010.
Eo tempore gens sarracenorum in loco qui Septem dicitur ex Africa transferentes universam Spaniam invarerunt.
---Pablo el Diácono (c. 720-800), Historia langobardorum, 6, 46.

No, el título de la entrada no es un error: en este año 2011 que comienza se conmemora el milésimo tricentésimo aniversario del inicio oficial de lo que en árabe suele denominarse فتح الأندلس, la conquista de Al-Ándalus, y no sería de extrañar que, con este motivo, al "olmo viejo, hendido por el rayo y en su mitad podrido" de Olagüe le salgan, como al de Machado, "algunas hojas verdes"... más; prueba, como decía en otra parte, de que continúa habiendo un Al-Ándalus indigesto, intragable, cuyo único aderezo posible es la ficción.

Las incursiones de norteafricanos en la Península, por cierto, no eran nada nuevo. Ya hacia el último cuarto del s. II d.C. se había producido una bastante importante ("cum Mauri Hispanias prope omnes vastarent" dice la Vita Marci, 21, 1s, "res per legatos bene gestae sunt"). Tampoco habían de serlo, ya lo sabemos, las de peninsulares en el Norte de África, pero, quién sabe, quizá dentro de mil y pico años haya quien sostenga, p. ej., que O'Donnell jamás entró en Tetuán (ni hubo batalla de tal nombre, porque el estilo de Dalí no se conocía aún), que el desembarco de Alhucemas habría sido imposible con los medios de la época y que el protectorado español tuvo en realidad su origen en una adaptación transfretana, autóctona y espontánea de la fiesta de moros y cristianos, que por culpa del hachís y el alcohol de importación acabó saliéndose de madre en Annual. De ahí que a Franco (originalmente الافرنجي, por su pertenencia al bando de los "remendados") lo llamaran peregrino (الحاج فرانكو), y que su guardia, cómo no, fuera mora.

Todo encaja.

Feliz año nuevo, en fin, y que el 711 nos sea leve.

5 comentarios :

Anónimo dijo...

Está bien recordar esto de vez en cuando, que los 14 km que hay entre la península y el norte de África ni son insalvables ni son sólo en una dirección; creo que deberíamos de tenerlo siempre presente. Me estoy acordando ahora mismo de un profesor mío que nos insistía muchísimo que tuviéramos siempre presente que la península recibe siempre influencias "orientalizantes" y "occidentalizantes" y que esto es una constante que muchas veces olvidamos. Deberíamos darnos más cuenta de la riqueza cultural que nos da estar donde estamos, y también saber que la historia no es siempre como nos la cuentan.

Feliz año a tí también :) espero que el nuevo año te traiga muchas alegrías .

Anís del moro dijo...

Gracias, Renata. Lo mismo te deseo yo. Por desgracia sigue habiendo quien no pasa de los dos primeros versos de la balada de Kipling: yo a la última que se los escuché fue a una cerebral compañera del trabajo, pero son del gusto de muchos.

Jesús dijo...

Ya se sabe que lo de la Luna fue también un blof. En cualquier caso, y como comentario tangencial, leyendo algunas reseñas y hasta algunas críticas de la obra de Olagüe, y en algún caso de las más conspicuas, se pregunta uno si no será que hay que elegir entre saltar del fuego para caer en las brasas. Pero ya digo que es un comentario tangencial.

Anís del moro dijo...

En cualquier caso, cuando uno está rodeado de llamas, lo prudente es caminar agachado, no utilizar los ascensores y esperar a los bomberos... A menos, claro está, que las llamas provengan de una falla valenciana.

Anís del moro dijo...

Sin novedad en el frente: Santiago Belausteguigoitia, "El gran cambio histórico de 711", El País, 20.02.2011.

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